Este 26 de Enero nos encuentra en una situación grave frente al cuidado de nuestra casa común especialmente aquí en Argentina el nuevo gobierno esta tratando de sacar un DNU y una ley onmibus que atenta contra los bienes naturales y la educación entre otros items graves que se proponen. Compartimos con Uds. un simple listado de «lo que se viene» si llegase a salir:
¿Qué sucederá con el Ambiente de nuestro país luego de los últimos anuncios presidenciales? Si bien en materia ambiental la política Argentina viene en deuda hace años, las primeras dos medidas del actual gobierno a modo de DNU y «ley ómnibus» marcan un grave retroceso legislativo para la conservación y perpetuidad de la Naturaleza. Nuestros bienes comunes corren serio riesgo. Ley de Bosques: Se desfinancia completamente la ley y su alcance, quitando capacidad de control y aplicación de la misma. Sumado a esto, se permitiría realizar desmontes en zonas de bosque nativo de alto valor de conservación, categorizadas como Rojo y Amarillo. Ley de glaciares: Se permitiría la explotación minera en zonas de periglaciar (hoy día completamente prohibida por el daño irreparable que ocasionaría) al cambiar la definición de glaciar expresamente escrita en la ley Ley de fuego: Habilitaría las quemas tácitamente, al otorgar un período de 30 días en que el solicitante debe esperar la autorización de la autoridad local para realizar la quema con fines productivos, el cual pasado esos 30 días en caso que no se expida la autoridad, el solicitante puede realizar las quemas sin perjuicio alguno para sí mismo, más que la destrucción del ambiente.
Control de agrotóxicos: Se eliminaría el control de fertilizantes y herbicidas a granel, permitiendo su uso y traslado sin control alguno. Ley de tierras: Se permitiría sin límite alguno la adquisición de tierras del país a cualquier ciudadano extranjero, sin importar el fin para el que sea utilizada, pudiendo privatizar lagos, lagunas, montañas y humedales. Sumando esto a las inconstitucionales medidas adoptadas que buscan criminalizar la protesta, quitar controles ambientales y derechos laborales, lamentablemente, nos encontramos ante un escenario de profundización de la crisis climática y socioambiental en que estamos inmersos. Es necesario igualmente, seguir planteando que la salida es colectiva, que el camino hacia la transición productiva, energética y social solo puede ser posible de forma organizada, solidaria y colectiva.
Como desde el comienzo, seguiremos en las calles y en el barrio sembrando conciencia ambiental