El 26 de Enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, que tiene como principal objetivo identificar la problemática ambiental tanto a nivel global, como a nivel local y crear conciencia en las personas y muy especialmente en los gobiernos en cuanto a la necesidad de participación por conservar y proteger el medio ambiente.
Esta fecha tuvo su origen a partir de la Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente celebrada en Estocolmo, Suecia, en junio de 1972, en la cual se debatió la importancia de cuidar el medio ambiente y se expuso la necesidad de unos principios comunes que ofrecieran a la sociedad una inspiración y guía para preservar y mejorar nuestro entorno. Las posteriores conferencias internacionales (Belgrado, 1975; Tbilisi, 1977; Río de Janeiro 1992, Cumbre de la Tierra; Guadalajara 1997, y los numerosos Congresos Iberoamericanos de Educación Ambiental) vendrían a corroborar la importancia de la educación. Es importante estar pendiente de los daños ambientales que sufre nuestro planeta y como poder revertirlos, para evitar así, el Cambio Climático, la extinción de especies de flora y fauna…, y otros fenómenos que tanto afectan los ecosistemas. Actualmente . vivimos una crisis de civilización, una crisis creada por el consumo masivo. Una crisis profundamente humana. Una crisis que no logramos cambiar. Es por esto que hoy aprovechamos esta fecha para recordarnos todo el trabajo que tenemos por delante pensando en las actuales y futuras generaciones y tratando de diseñar un futuro sustentable en el hoy.
Singularmente en nuestra región latinoamericana ayer vivimos una nueva catástrofe ambiental en Brasil, con al menos nueve personas murieron, 300 se encuentran desaparecidas y 189 fueron rescatadas en la localidad de Brumadinho, en Minas Gerais, como consecuencia de una avalancha de lodo por la rotura de una represa y el desborde de otras dos que contenían residuos minerales de la compañía Vale, la mayor productora mundial de hierro. Esta catástrofe vuelve a demostranos la crisis humanitaria que vive nuestro planeta. Por otro lado en esta semana en Bélgica una multitud de niños y niñas se han manifestado en pos del cambio climático, una marcha que nos alienta para continuar nuestra lucha y resistencia en busca del cuidado de nuestro planeta.
Equipo EAR.