Nos enfrentamos a una crisis ambiental global!
Que la salud de nuestro planeta corre un grave peligro no es nada sorprendente. Año tras año, las cifras siguen dejando constancia del impacto de la actividad humana en la Tierra. Precisamente por eso cada 26 de enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, que pretende llamar la atención sobre esta problemática a la que nos enfrentamos, abordándola desde criterios y principios comunes para todos los países. Desde que en 1972 las Naciones Unidas introdujesen el concepto de educación ambiental se ha intentado estudiar y minimizar el impacto del hombre en el ambiente.
Potenciar la educación ambiental y la movilización social en todos los ámbitos posibles es un reto imposible de dejar a un lado. Día a día vemos como las comunidades locales se movilizan contra el atropello tanto del Estado como de los capitales privados, que buscan seguir mercantilizando la Naturaleza. Y más y más vemos como las movilizaciones crean más y más conciencia local y regional.
Trabajar por una educación ambiental que construya los inéditos posibles se traduce en la construcción con los otros, en comunidad, de formas novedosas e inéditas de proteger nuestro «oikos», nuestra casa, nuestra Pachamama. Es así que en Latinoamerica nos vemos enfrentados al accionar creativo, al saqueo y pillaje del que hemos sido víctimas desde hace mucho mucho tiempo. Hoy el pillaje a la Naturaleza toma formas más modernas, más «cool» ( como construcción de barrios exclusivos o privados ) pero detrás de estas máscaras se esconde la misma ideología. El pillaje de la Naturaleza y los bienes comunes para unos pocos.
Estamos, entonces, llamados a crear conciencia colectiva e inteligencia colectiva. Pensando juntos los nuevos caminos que nos lleven a la reconstrucción de los lazos rotos entre Naturaleza y sociedad. Y aquí los educadores ambientales tenemos un rol preponderante. Un rol de transformación social y política. Local y globalmenten en eso andamos! Feliz Día!
Equipo EAR